Las nuevas leyes que regulan las emisiones máximas permitidas a los coches nuevos que se venden, están obligando a que cada vez vemos gamas de motores más respetuosas con el medio ambiente, y como no, los motores que monta el Nissan Pulsar no se han quedado fuera. Por este motivo, Nissan ha tenido que realizar pequeños ajustes para que el Nissan Pulsar cumpla con la normativa Euro6 de emisiones.
El paso de la normativa Euro5 a Euro6, hace que, en términos medioambientales, prácticamente se igualen las emisiones de los Diesel a las de los motores de gasolina.
El diesel del Pulsar, el 1.5 dCi de 110 cv de la sexta generación de la Alianza Nissan-Renault, fue adaptado a la norma de emisiones Euro6. Y se hizo no sólo reduciendo hasta un 10 por ciento sus emisiones de CO2 y su consumo, también con un incremento de 20 Nm del par máximo respecto a su predecesor, con 260 Nm disponibles en una amplia gama de revoluciones: desde las 1.750 hasta las 2.500 rpm. Un beneficio doble para el conductor, de ahorro de combustible y mayor agrado de conducción, que además supone menor impacto medioambiental en cada recorrido.
Uno de los elementos claves para el cumplimiento de la norma Euro6 es un sistema de recirculación de gases (EGR) de baja presión. Los sistemas de alta presión recuperan los gases de escape al salir de la cámara de combustión y los reinyectan en el colector de admisión mezclados con el aire, pero tienen el inconveniente de subir las temperaturas de admisión y limitar la presión de la sobrealimentación. Los de baja presión, como el que incorpora adicionalmente el dCi, recuperan esos gases tras su paso por la turbina y el filtro de partículas. Son enfriados antes de volver al turbo, donde se mezclan con el aire que llega por la admisión, lo que permite tener más presión de sobrealimentación. De allí los gases son enfriados nuevamente con el intercooler y llegan, otra vez, a la cámara de combustión. Este bucle permite reducir las emisiones de óxidos de nitrógeno (NOx) de forma más eficaz, sin perjudicar el rendimiento del motor.
Por otro lado, la mecánica gasolina 1.6 DIG-T de 190 cv, que además del Pulsar, también montan el Juke y el Qashqai, ya cumplía con la normativa Euro6 desde su lanzamiento. Dispone de una válvula de recirculación de gases (EGR) refrigerada o un sistema Stop/Start, encargado de apagar el motor cuando el coche se detiene y de rearrancarlo automáticamente para reiniciar la marcha.
El Pulsar DIG-T 190 tiene un consumo medio homologado de sólo 5,9 l/100 km, una cifra que lo sitúa entre los consumos más bajos de los compactos con motores de gasolina de unos 200 cv. La respuesta del motor al acelerador es constante y contundente desde muy bajo régimen, casi desde el momento en el que se pulsa su botón de arranque, lo pone de manifiesto una entrega de par máximo de 240 Nm desde 2.000 rpm y hasta 4.000 rpm.
Por último, el Nissan Pulsar cuenta con una mecánica gasolina más modesta, un bloque 1.2 DIG-T que ofrece una potencia de 115 cv. Dotado de una distribución variable (VVT) en combinación con un colector integrado del turbocompresor, este motor asegura una gran disponibilidad de par desde muy bajo régimen y a lo largo de una amplia banda de revoluciones. Así, su par máximo de 190 Nm se entrega a 2.000 rpm y se mantiene en valores superiores al 95 por ciento hasta prácticamente las 4.500 rpm.