Las baterías para coches eléctricos llevan años evolucionando de una forma destacable su tecnología y eso repercute en su seguridad y vida útil, pero también en la autonomía que es capaz de prestar este tipo de vehículos y en la velocidad de carga. Y las nuevas baterías con ánodo de silicio apuntan a ser un gran impulso en este sentido. Lo mejor de todo es que esta tecnología está a punto de llegar, tanto que se empezarán a fabricar desde el año que viene. La idea es que el silicio sirva como reemplazo del grafito que se usa a día de hoy de forma generalizada en el ánodo de las baterías, y el motivo es que hay grandes ventajas técnicas detrás de este cambio.
Se habla de ‘una nueva generación de baterías’ como forma de referirse a estas nuevas baterías con ánodo de silicio porque, efectivamente, este cambio en la composición química de las baterías que usan los coches eléctricos significa un gran impulso para dos aspectos clave: por un lado la autonomía que pueden ofrecer por su mayor densidad energética, y por el otro lado porque son capaces de aceptar cargas mucho más rápidas. Estos dos aspectos son críticos para luchar contra la conocida como ‘range anxiety’, que con los coches gasolina y diésel no existía en absoluto. Informa Reuters al respecto y, efectivamente, hablan de que su llegada es inminente y van a cambiar de una forma notable las capacidades de los coches eléctricos en este sentido.
El gran cambio que traerán las nuevas baterías con ánodo de silicio, más autonomía y carga más rápida en coches eléctricos
La publicación se refiere a compañías como Group14 Technologies y Sila Nanotechnologies. Estas dos están bastante centradas en las nuevas aplicaciones del silicio en relación a las baterías para coches eléctricos. La idea con la que trabajan estas dos empresas es en utilizar el silicio como complemento o reemplazo del grafito que a día de hoy se está utilizando en prácticamente todas las baterías para coches eléctricos. Este es un cambio en la composición química del ánodo, que es bastante más atípico que las variaciones químicas aplicadas al cátodo. Y poco tiene que ver con un cambio de electrolito, como es el caso de las baterías de estado sólido.
Group14 es una empresa con siete años de recorrido, y ya ha empezado a construir sus instalaciones de producción de baterías de grado comercial en Moses Lake. Allí es donde se van a dedicar, efectivamente, a producir estas nuevas baterías de silicio y carbono. La planta de producción se abrirá en el año 2024 y será cuando arranque sus operaciones, y tendrá la capacidad inicial suficiente como para producir baterías de ánodo de silicio para 200.000 coches eléctricos. Ahora bien, ya tienen proyectado triplicar su capacidad de producción de forma progresiva para poder enfrentarse a la creciente demanda de coches eléctricos en todo el mundo.
Y el primer cliente con el que cuentan dentro del sector del automóvil es, nada más y nada menos, Porsche. Es uno de sus inversores junto a TDK, Amperex Technology Limited, BASF y SK Inc. De momento ya han conseguido un apoyo financiero de 650 millones de dólares, y esto no es por otro motivo más que porque las baterías de ánodo de silicio, como ya mostró al mundo Mercedes-Benz cuando presentó en sociedad el Mercedes EQG, son una de las tecnologías más prometedoras que tiene el coche eléctrico por delante. Además de esa planta de producción tienen otra en camino en Corea del Sur, junto a SK, que abrirá sus puertas este mismo año 2023 según ha informado su CEO y cofundador Rick Luebbe.
Pero esta compañía no está sola. Nos referíamos antes a Mercedes-Benz porque, efectivamente, la firma alemana tiene proyectado que su Mercedes EQG llegue al mercado mundial con estas baterías con ánodo de silicio. Y para ello van a contar con Sila Nanotechnologyes, que va a empezar durante el próximo año la producción de este material de ánodo. El primer cliente va a ser Mercedes-Benz en el año 2025 y, efectivamente, con este digno sucesor eléctrico del Mercedes Clase G. Sila Nanotechnologyes ha conseguido una recaudación de más de 900 millones de dólares gracias a Mercedes, ATL y Siemenes entre algunos otros, que son quienes han confiado en estas nuevas baterías de ánodo de silicio.
Estas compañías hablan de que están recibiendo grandes presiones para avanzar más rápido y a mayor escala porque, efectivamente, la industria del automóvil tiene un gran interés en estas nuevas baterías con ánodo de silicio. Y a pesar de ello, desde la directiva de estas empresas hablan de que ‘pasarán más de 10 años’ para que el silicio sirva como reemplazo total del grafito en el ánodo de las baterías. Y es que, efectivamente, aunque esta tecnología está a punto de llegar en algunos primeros coches eléctricos, va a hacer falta algo más de tiempo para que se extienda y generalice.