Tal vez estés pensando en comprarte un coche nuevo. Es lógico, en 2018 van a llegar un montón de modelos nuevos bastante golosos. Pero comprarse un coche no es tarea fácil. Hay que mirar muchas cosas, y el bolsillo no es la menor de ellas.
Elegir el modelo de coche no es sencillo. Vas al concesionario con una idea, lo ves, te montas, incluso lo pruebas y te llevas una grata impresión. Pero el vendedor te habla de otro segmento y comienzan las dudas. ¿Le añado estas opciones? ¿Y si por un poco más tengo más potencia o más comodidad? ¿Pero si…? A eso únele el anuncio que ves en la tele de otra marca, o el nuevo modelo que se haya pillado tu amigo o tu cuñado. Y si tienes que contar con tu pareja, con los niños, con los abuelos o con el perro, ya te vuelves loco.
Hay muchas opciones para comprar un coche nuevo
No hace falta tener 14.000 € (o más) en el bolsillo para soltarlos a golpe de talonario en el concesionario (aunque, reconozcámoslo, a todos nos gustaría). Los planes de renovación, el plan MOVEA si buscas un coche eléctrico, la posibilidad de vender tu coche actual de segunda mano o de entregarlo en el concesionario son opciones que nos harán aliviar el bolsillo.
Esperar a ofertas de lanzamiento también es una buena opción. Ofertas puntuales también son una posibilidad tentadora. O muchas otras, como modelos kilómetro 0, esperar a adquirir el modelo antiguo justo antes de salir el nuevo, no andarte por las ramas con las opciones… Las posibilidades de ahorrar sólo acaban donde termina tu imaginación.
Sea cual fuere la opción que elijas, la financiación será al 99% de probabilidad tu aliada en esta nueva compra de un coche. Para ello, lo ideal es pedir un préstamo. A la hora de pedir uno, es esencial estudiarlo bien para que no se nos vaya de madres la compra de un coche nuevo y nos salga más caro el collar que el perro (o los neumáticos que el vehículo).
Es esencial buscar el mejor préstamo para comprar un coche. Los préstamos suelen tener comisiones de apertura y otros intereses. Además, la cuota mensual debe poder ajustarse a tus posibilidades. Si no te saldría mejor ahorrar durante 36 meses para comprarte el coche a golpe de talonario mientras usas el autobús. El montante final siempre te será más caro que lo que te costaría el coche a tocateja, así que buscarte la opción más económica posible para pagar menos por tu coche nuevo es la opción inteligente.