El Fisker Pear será un coche eléctrico importante para la marca, porque será su modelo más barato. Está programado para ser el próximo lanzamiento tras el Fisker Ocean, en paralelo al lanzamiento del Ronin, y el objetivo es que llegue al mercado a un precio de 28.000 euros, aproximadamente. Con él, la marca quiere ‘revolucionar’ el sector planteando un coche más simple y más barato, pero completo en tecnología.
En este adelanto de diseño del Fisker Pear, en realidad, hay poco margen de error porque el propio Henrik Fisker ya publicó un teaser en el que se mostraba el diseño del coche –por delante, eso sí- casi sin ningún secreto que guardar. Además, en aquella publicación señalaba que deberían tener listo un prototipo para enseñar al público incluso antes de lo que inicialmente estaba programado. Por otro lado, daba también algunas pinceladas y detalles clave sobre el planteamiento de este modelo, que será su coche eléctrico más barato.
Cómo será el Fisker Pear, el coche eléctrico más barato y simple de la marca
A finales de este mismo año se debería presentar el nuevo Fisker Pear en forma de prototipo, aunque estará disponible desde la segunda mitad de 2023. Un modelo que, a pesar de sus dimensiones relativamente compactas y su precio, ofrecerá 500 kilómetros de autonomía en su versión con mayor capacidad de batería. Además de esta habrá otra opción inferior, evidentemente más económica, con menos batería y una autonomía algo más limitada.
El modelo, según la información disponible, estará en torno a los 4,5 metros de largo y por lo tanto lo más cercano va a ser el segmento C. Es decir, que a priori sus rivales podrían ser modelos como el Volkswagen ID.3, el Cupra Born o el MG 4. Pero desde la marca han asegurado que ‘no encajará en ningún segmento’ y será un producto revolucionario. Quieren que sea más práctico que otra cosa, y por eso tanto el diseño exterior como su interior van a alejarse bastante de otros productos con los que podría competir en el mercado.
Aunque en este primer adelanto de diseño el Fisker Pear parece más bien un Fiat Multipla del futuro, los rasgos de diseño finales no están aún definidos por completo. La marca ha querido conservar el detalle al máximo, en la medida de lo posible, porque consideran que tienen un producto revolucionario y no quieren dar pistas a sus competidores. Pero, efectivamente, el concepto es bastante parecido al del Multipla original en tanto que se quiere dar la mejor visibilidad posible desde el interior y primar el espacio en el habitáculo.
Próximamente podremos conocer más detalles del Fisker Pear. Pero lo que está claro, al menos según las indicaciones del propio fabricante, es que es un coche eléctrico que irá a contracorriente en muchos aspectos. No quiere ser un coche que se enfrente a las propuestas actuales, sino un vehículo centrado en la movilidad y en ser práctico. Pero tampoco parece que vaya a ser especialmente atractivo.